José era un adolescente que pasaba mucho tiempo en su sala, usando la computadora, ya que no tenía una laptop para estar en su cuarto, lastima… Bueno, un sábado toda su familia había salido y él se había decidido quedarse ahí, en su sala. Luego de un rato de jugar al “WoW” empezó a sentirse observado… Al principio lo ignoro, pero empezó a sentirlo cada vez más y más… Se canso de eso y empezó a buscar quien y de donde lo observaban, después de un rato de buscar que lo estaba observando y al no encontrar la fuente de su molestia, se rio y siguió jugando. Al pasar una hora, el empezó a escuchar algo, en la casa de su vecino, y ya que vivía en un condominio, podía ver la casa del vecino muy fácilmente. Cuando volvió a ver vio una ventana abierta, y como una niña lo observaba, -Pero, en esa casa no hay niños, solo una pareja- Se dijo José… Seguro es una invitada, sí, eso es. Empezó a oscurecer y se dio cuenta de que la niña lo seguía viendo, desde hace 4 horas no lo había dejado de observar, -Que extraño- Sera que a los padres se les olvido su niña, se pregunto José… Decidió ir a avisarle a los vecinos que había una niña en el piso de arriba, pero al tocar la puerta, se dio cuenta que había un silencio escalofriante. José se empezó a preocupar por la niña, -Que tal si está sola en la casa?! –Se pregunto José, -No, ahí están los carros de los vecinos- José decidió entrar a la casa, ya que la puerta estaba abierta, -Hola? –Dijo José, -Hay una niña en el segundo piso- -Hola?-, Jeff se empezó a preocupar y subió al segundo piso, donde había escuchado un gemido. Al terminar de subir las escaleras vio un espectáculo terrible, los vecinos estaba desangrándose, y los invitados estaban degollados, la vecina, llamada Lucia le dijo a José,-Corre imbécil, que te va a matar a ti también-, -Pero, quien?- Dijo José desconcertado, -Yo- le susurro la niña en el oído, al mismo tiempo que le clavaba un puñal en el estomago, -Pero… por qué haces esto- Mascullo José mientras se desangraba, -Tu solo eres una inocente niña-, -Me sorprende lo que este estúpido caparazón puede hacer- Dijo la “niña” mientras se despedazaba el estomago. Lo último que José vio fue un ser totalmente negro, con una capa de sangre y sufrimiento, diciéndole –Tu raza le reza a un dios que no existe, ya que nosotros ya nos encargamos de él, ahora tu raza conocerá el sufrimiento, lo que una apariencia puede hacer- José solo lloro, porque sabía que el ser le estaba diciendo la verdad, el ya no iría a ningún cielo, ya que no había ningún dios, el iría al vacio, a ser devorado por titanes y demonios, por haber sido tan idiota de creer que hay un ser perfecto, que lo único perfecto que tiene es el control de las mentes de los cretinos creyentes.