«Mi última carta»

¿Te has imaginado como se siente morir?
Vamos, inténtalo, imagina que estas muriendo, poco a poco, tu hilo vital se va yendo.
Es fácil, sólo deja llevarte, olvida todo. Cuando estes listo, acompañame en mi muerte. Mi vida, la recuerdo toda, todo fue tan corto.
En el momento que todo pasó, aquél momento en el que el ladrón quiso tomar mi reloj y me resistí. Disculpa,
ya empiezo a alucinar. Aunque no me creas, en estos momentos estoy muriendo. Al principio fue una sensación
desagradable, el desgarre de aquella navaja, fría como el hielo, asesina como ella sola. ¿Cómo escribo si no me quedan fuerzas?
Sangre, es con la última tinta que estoy escribiendo. Ya no queda más…un momento, alguien acaba de llegar. Se ha parado junto a mí.
Viste de una forma rara, es un tanto espeluznante, pero se dice mi amigo. Dice que es hora de irse. ¡Pero yo no me quiero ir!
Quiero estar con mi mamá, sólo tengo 10 añitos!! Me siento solo, desprotejido. Frío…lo único que siento, aparte de la presencia putrefacta de
mi amigo oscuro. Dice que me despida, ¿pero de quién? Sólo estas tu, mi lector, el que me esta acompañando en mis últimos momentos.
¿Puede pedirte un favor? ¿Puedo quedarme contigo? ¿NO QUIERES? Te digo algo…no me importa, vamos a divertirnos, quiero jugar contigo.
Mi amigo oscuro me ha dado permiso de eso, dice que él también quiere divertirse contigo. Te estaré esperando esta noche mi amiguito.
Jugaremos del otro lado dice mi amigo oscuro. Vamos, quiero divertirme, quiero recuperar mi sangre perdida, creo que te la robaré a ti.
¿No te molesta verdad?

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clades

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