La niña y su Ropero

La entrada al otro Mundo

Era una tarde, en la habitación de una pequeña niña.

El atardecer entraba por la ventana dando un tono anaranjado-rojizo al cuarto, esos atardeceres en los que entras en un tipo de trance que relaja y tranquiliza el alma, esos atardeceres en los que uno se duerme sin mucha dificultad dejando la realidad y soñando fácilmente.

Pero la niña no tenia sueño, ni nada por el estilo, ella estaba jugando con sus muñecas, aunque para ella mas que muñecas eran hadas a su alrededor. SI, una fantasía que creo por que no tenia mucha compañía, su nana le había contado historias de hadas, ella quedo fascinada y desde entonces para ella sus muñecas eran hadas que bailaban y jugaban a su alrededor.

Déjenme les cuento ….

Ella era la hija única de una joven pareja, con solo 6 años de edad ya sufría de la ausencia de sus padres, aunque su nana era la que permanecía mucho tiempo con ella, no era igual que un momento con sus padres.

El padre era un joven trabajador,  unos 26 años, dueño de una cadena de locales comerciales heredados de su padre que falleció junto con su madre en un accidente de avión dejándole todo a él.

La madre joven, con 25 años, no se quería atar a responsabilidades, incluyendo a su hija, obligándola a tener una nana para la niña, para así poder seguir “viviendo” su vida.

La nana era vieja y algo distraída, aunque nunca desamparaba a la niña, dándole todo lo que necesitara, pero no se podía librar de la vejes, ya saben, fatiga, dormir siestas, cosas de viejos……

Regresando al cuarto, si mirabas por fuera de la ventana, podías, con claridad, ver la cama en medio y un armario de madera al fondo. Enfrente de la cama, en el suelo sentada, la niña con un vestido color gris y un listón rojo alrededor de su cintura simulando un cinturón, unos zapatos rojo brillante y su pelo color café claro con sus dos coletas peinadas con listones rojos, podrían imaginarse a una niña de lo más linda, con piel clara y ojos color miel.

Ella estaba sentada jugando, sin preocupaciones en su mundo de fantasía, cuando de pronto de la nada sale un, apenas audible ruido, ella volteo  a observar tranquilamente la habitación pero no encontró nada, así que siguió jugando.

Entonces, volvió a sonar con un poco mas de intensidad, provocando que se sobresaltara un poco volteando a todo el cuarto dando vistazos rápidos.

Con un poco de inseguridad sigue jugando, pero prestando atención a todo sonido, entonces sonó otra vez, pero esta ves, pudo distinguir una voz susurrando y alargando un poco la palabra

-veeeeeen

Lo que hizo que un pequeño escalofrió le recorriera la espalda y quedara inmóvil.

Levantando la mirada Pensó –que abra sido eso? – se levanto sin moverse del lugar y volteando, examinando su habitación, -abra sido nana? –volteo a la derecha,  camino hasta la puerta, la abrió y sin decir nada, solo asomándose un poco, escucho a su nana abajo cocinando y tarareando una canción, aun que solo se oía si se abría la puerta, además que sus padres no estaban. Hizo una expresión de “bueno, que más da”, Al serrar la puerta, se escucho

-veeeeeen

Pero con fuerza y sin dejar el tono de susurro, esto hizo que se asustara un poco. Esta vez pudo identificar el lugar, volteo a su derecha y mirando fijamente el armario, pensó –de ahí viene!?.

Era un armario grande y viejo, ahí guardaba su ropa y zapatos aparte de otros objetos de diferente tipo.

Estaba asustada, pero de pronto la idea de que fuera un hada la invadió. Si, un hada, esto hizo que se emocionara un poco pensando –si es un hada ¿me invitaría a jugar?, querrá ser mi amiga?, que emoción!!!!- su imaginación desbordada por mucha excitación, la hacia moverse lentamente, de paso a paso, estirando su mano hasta la perilla del armario.

Quedo en medio del armario y al colocar la mano en la perilla, se volvió a oír en tono de susurro pero  muy fuerte, aunque ya sonaba como una orden.

-veeeeeeeen

Esto la sobresalto, provocando un muy fuerte escalofrió que le recorrió todo su cuerpo dejándola inmóvil por unos segundos, al dar unos pestañazos y sacudir un poquito su cabeza, recobro su movilidad, insistiendo que tal vez era una hada y prosiguió a girar la perilla.

Al abrirla un poco, las puertas del armario se abrieron rápidamente, empujándola hacia atrás.

De la obscuridad del armario un par de ojos amarillentos y brillantes, extendieron un par de brazos blancos con uñas cafés y puntiagudas, rápidamente antes que la niña callera al suelo, ese par de manos la agarraron fuertemente del cuello de su vestido jalándola tan rápido que la niña no pudo decir nada, ni un sonido salió de su boca.  Fue succionada hacia adentro del armario, tan rápido que serró las puertas de la misma dando un sonido seco pero fuerte, todo esto en segundos.

La nana desde la cocina, escucho el portazo, subió rápidamente (como sus piernas se lo permitían) al cuarto de la niña, pero al abrir la habitación no vio a nadie, solo un cuarto vacío.

“Espero que esta pequeña historia les guste pues a mí…. Como me lo imagino y pienso a detalle  las imágenes que aparecen en mi cabeza, la historia me aterroriza de algún modo……  mi intención es contarles asta el ultimo detalle de esta primera parte que ira avanzando hasta el desenlace……. Y decir que me lo imaginaba tocando la guitarra inventando sonidos raros…….. Bueno, muchas gracias por leer esto  y  me despido por ahora, que tengan buen día y se diviertan mucho…….. si me pueden dar consejos de como redactar o cosas así me agradaría ya que esto es lo primero que escribo……

de mi cabeza jajajajaja

Peter Gonzalez

Please wait...

6 comentarios

esta muy bueno, solo que me gustaria que hubieses detallado el origen del armario aunque este material da para mas partes, felicidades! espero leer una secuela te dejo 4/5 si escribes la secuela te doy 5/5!

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