La mutiladora

Estaba harta de tener que aparentar estar bien, no aguantaba más esa falsa sonrisa…

Se despertó, su madre se había ido a trabajar al centro infantil, le prestaba más atención a esos niños que a ella. No tenía ganas de desayunar, se fue a su cuarto a escuchar música y llorar. Intentaba desahogarse con canciones de Nu metal, pero esta vez no funcionó.

Fue a por más pañuelos, cuando se puso frente al espejo del baño paró de llorar, el dolor y el odio se quedaron ahí. Tenía que quitárselo de encima, quemarlos. Eso hizo, se puso alcohol en su dedo índice y dibujó una sonrisa en su rostro, cogió el mechero y la quemó, le dolía pero sabía  que su sonrisa sería permanente. Las llamas se apagaron, Aurora se miraba orgullosa pero el dolor y el odio seguían allí.

Tocaron la puerta, eran unas niñas vendiendo cosas para su viaje de fin de curso, ella se puso un bufanda en la boca y abrió la puerta, le dijo a las jóvenes que entraran a la cocina y se percató de la pequeña hacha que tenía su madre para cocinar, la cogió y atacó a una de las niñas cortándole las manos. La segunda joven seguía allí horrorizada por la escena, gritando. Aurora la decapitó. Tras acabar con las dos niñas, ella paró la música, se sentó en el suelo y lloró, esta vez de felicidad.

Sonó el teléfono, era su madre:

-Hija, volveré tarde, esta tarde tengo reunión de padres…

-¡Perfecto!- dijo Aurora interrumpiendo a su madre.-Pues yo me voy de casa y te dejo esta sangría para ti sola.

-¿De qué sangría hablas, ya estás con tus bromas?- respondió.

-Adiós mamá- dijo colgando el teléfono.

Se dirigió a su cuarto y se vistió, cogió una mochila pequeña y metió su hacha, su reproductor de música, agua, comida, una manta, una almohada y su libro favorito: Dr. Jeckyll y Mr. Hyde. Se fue, no sin llevarse la mano de una de las niñas, metida en el autobús que llevaba a un pueblo, Aurora esperó a que parara en la parada más vacía para asesinar a sangre fría a los ocupantes del vehículo, los mutilaba y esperaba a que murieran desangrados, al acabar durmió allí. A la mañana siguiente fue a un lago que estaba bastante lejos y se bañó allí, cuando terminó fue al pueblo y entró en un pequeño bar.

Mientras desayunaba pusieron las noticias, hablaban del asesinato de las dos niñas y su foto apareció en la pantalla, enseguida todos la miraron. El dueño del bar sacó una escopeta y a Aurora no le dio tiempo de sacar su hacha, ya tenía la bala en su garganta. Se habían descubierto los cadáveres del autobús, los forenses, por la brutalidad de los asesinatos, apodaron a Aurora: »La mutiladora». En su funeral solo asistió su familia, a la noche siguiente, un sepulturero encontró a dos jóvenes mutilados y el cuerpo de la mutiladora no aparecía. Tampoco su hacha, que se encontraba en la comisaría, tres policías habían aparecido sin manos. Nadie pudo encontrar explicación.

Creación propia

PuellaeMortuae

Adoro las películas Slasher (odio sus remakes) Nací en halloween, de lo cual me siento orgullosa, y como tengo insomnio muchas veces mi mente vuela y necesito escribir algo, lo pongo todo aquí.