La mujer de la parada.

Era ya tarde, esa noche yo salia de mi trabajo mas tarde de lo normal por lo que perdí el camión que tomo habitualmente, antes de partir y optar por llamar a algún amigo para que me llevara a casa pude notar a una señora que esperaba al igual que yo,supuse que otro autobús estaba próximo a pasar así que me acerque a la parada y después de no más de un minuto me dispuse a preguntarle a la señora si estaba esperando algún otro camión a lo que ella no respondió. Creo que la respuesta era muy obvia y por lo mismo se negó a contestar, en fin, tome mi celular y trate de llamar a mi esposa para avisarle que llegaría más tarde pero al parecer no había señal, en eso el autobús llego a la parada casi como si simplemente hubiera aparecido, tome mis cosas y lo aborde al igual que la dama que se encontraba con migo, una vez arriba note que ella tenia problemas para subir y amablemente trate de ayudarle, pero su reacción fue muy extraña, al momento que la tome del brazo ella gimió y grito pidiendo ayuda entonces la solté y tome lugar junto a la ventana esperando que nadie se exaltara por lo que recién sucedió. Hubo un silencio total, la gente me miraba con miedo como si la hubiera atacado y simplemente me quede mirando fijamente por la ventana.

Yo vivo muy lejos en una zona rezagada de la población y no hay ninguna parada de autobús cercana, por lo que tengo que caminar aproximadamente un kilómetro hacia mi casa a través de un terreno desolado, un terreno baldío y oscuro con unos cuantos arboles y una pequeña casa que al parecer esta deshabitada, así que al ver la hora en mi teléfono me preocupé pues este marcaba la 1:33 A.M. y un lugar así no era de fiar y menos a esa hora. Al llegar a mi destino quedaba muy poca gente abordo solamente un hombre de 60 años, un joven y una madre con su hija no mayor de 10 años y por supuesto la señora que subió conmigo.

Baje del bus y comencé a caminar, sentí un escalofrió desgarrador cuando note que el camión no solo se detenía por mi, si no también por aquella mujer con aspecto extraño. Yo seguí mi camino tratando de ignorarla pero cada vez se acercaba más y más, caminaba al mismo paso que yo y lo peor de todo en la misma dirección; no paso mucho tiempo antes de que yo perdiera el control y saliera corriendo, pero justo cuando creí haberla dejado a tras pude visualizar a una persona como a 30 metros delante de mi. Entonces seguí caminando mientras mentalmente me repetía que no había forma de que fuera ella, pero al pasar de lado logre ver su rostro, un rostro mórbido lleno de arrugas y con una sonrisa de oreja a oreja que acompañada de unos ojos oscuros perturbaban mi mente. En ese momento se abalanzo sobre mi, me arrojo al suelo y mientras me arañaba con sus manos frías y delgadas yo desesperadamente trataba de soltarme pero mis intentos eran inútiles, sabia que estaba por morir y que tenia que reaccionar rápido así que tome un puñado de tierra y lo arroje a su cara y aprovechando la situación tome una piedra del suelo y la solté sobre su cráneo. Ella comenzó a convulsionarse hasta quedarse inerte, después escuche un grito de una mujer y murmuros de personas que desde la parada de autobús me llamaban asesino y llamaron a la policía. y eso es todo doctor.

-bien, ¿no hay algo más que quieras decir?

-si, tan solo una cosa más, ¿cuanto tiempo estaré aquí? quiero ver a mi esposa.

-eso dependerá de ti, es un proceso largo.

-pero, ¿y mi esposa?

-ella esta en un lugar mejor, quizá no debiste usar aquella roca.

(centro psiquiátrico de rehabilitación mental).