Los 5 amigos tomaron rumbo a la casa de su amigo, quien les dijo que tenía algo que contarles de suma urgencia. Guillen era un chico de 16 años que siempre tenia que soportar las pesadas y obstinadas bromas de sus amigos, quienes también lo consideraban uno, solo que un poco menos importante que el circulo que de por si lo conformaban los 5 amigos. Les pareció extraño que su amigo, Guillen, los invitara a su casa, considerando que la última vez que lo vieron, fue en el paseo de la escuela donde le jugaron una broma de mal gusto. Guillen tuvo que ser hospitalizado por un ataque al corazón, que gracias a Dios fue controlado. Sus amigos, por supuesto, se disculparon con el prometiéndole que no le jugarían mas bromas. Guillen acepto con la condición de que lo visitasen el domingo.
Y ahí estaban, los 5 amigos, aun creyendo que Guillen tomaría represalias contra ellos. Eran Gustavo, el mayor de ellos y el más aventado, Gabriela, la chica mas inteligente del grupo, y la parte consiente también, Melisa, Carlos, hermano de Melisa, y el menor de todos Gabo. La casa de Guillen parecía un palacio desde afuera. Tenia una puerta que podría ser perfecta en la casa de personas con gigantismo por su exagerado tamaño, también tenia dos gárgolas, cada una en las esquinas de su cada y ventanas en lo alto, ventanas tan cristalinas que te podrían reflejar exactamente como lo haría un espejo.
Los 5 compañeros miraron con la boca abierta la magnitud de la colosal casa, siendo interrumpidos por los golpes que hacia Gustavo para llamar a la puerta.
Los recibió Guillen. El se veía muy exhausto, como si hubiera hecho una larga carrera solo para abrir la puerta. Guillen los hizo pasar dirigiéndolos al segundo piso de su enorme mansión. Los 5 compañeros miraban, mientras eran guiados por Guillen, las exóticas reliquias que decoraban la refinada morada de Guillen. Finalmente Guillen los hizo pasar a una enorme cámara donde les pidió que se acomodaran. Los 5 amigos dudaron.
El lugar no era exactamente uno donde se pudiera acomodar; una mitad de la cámara era del mismo nivel que toda la casa, y la otra mitad era una parte inferior de la sala. Había una especie de pequeña mesa pegada al suelo, parecida a la de un juego de ajedrez. Había también una especie de puerta despegable encima de esta mesa, en el techo. En la parte inferior de la cámara, había una gran rueda de madera amarrada con una cadena.
El suelo de la cámara tenia pequeñas grietas, parecidas al efecto de un terremoto en una autopista, así mismo, el techo de toda la cámara parecía tener unos círculos muy marcados en el. Los 5 amigos se sentaron en el suelo alrededor de la pequeña mesa. Guillen los miro a todos, repasándolos minuciosamente mientras un incomodo silencio se apoderaba de la cámara.
-Les traeré algo de beber, siéntanse como en su casa.
De inmediato Guillen se retiro de la espaciosa cámara mientras la puerta se cerraba, dejando a los 5 amigos llenos de sospechas respecto al comportamiento de Guillen.
-Es que no lo notan? El aun sigue amargo- decía Gustavo a sus cuatro compañeros- nos ha traído aquí solo para jugarnos una broma que de por si, será estúpida.
-No lo se- dijo Gabriela- hay que darle el beneficio de la duda, además la broma que le jugaron fue de muy mal gusto.
-Jugaron? Jugamos querrás decir- dijo Carlos- todos apoyamos a realizar esa broma.
-Basta muchachos creo que hay que tranquilizarnos- añadió Melissa- después de todo ya le pedimos disculpas.
-Pero…- interrumpió Gabo- esas disculpas no eran lo suficiente para perdonar una broma así, además el estuvo internado por eso.
-Pero no fue nuestra culpa que no tuviera tanto aguante- dijo Gustavo- la broma no fue tan fuerte.
-Oigan, como que Guillen se demora mucho no?- dijo Melissa.
Gabriela se paro del suelo merodeando la extraña habitación y resaltando a sus amigos los raros gustos de Guillen.
-Ya han visto ese cuadro?- dijo Carlos señalando el cuadro de un paisaje muy colorido.
El cuadro en si no era lo que le llamaba la atención a Carlos, lo que le extrañaba era el enorme punto rojo que se encontraba al medio de la pintura.
-Como que arruina el cuadro no?- agrego Gabo- parece mas una mancha agregada.
Los minutos pasaban y pasaban pero Guillen no aparecía. En ese momento Gustavo se acerco a la puerta para salir en búsqueda de Guillen.
Cuando Gustavo estuvo a un metro de la puerta, una puerta resbaladiza cayo sobre la salida de la cama, uniéndose con los extremos de las paredes de manera que la salida quedara herméticamente cerrada. Los ahora atrapados se miraron con asombro, temiendo que lo que mas temían, se volviera realidad.
-Que esta pasando…- exclamo Melissa con preocupación en la voz.
-No es obvio? Guillen nos esta devolviendo la broma, lo sabia! Ese idiota lo planeo desde un principio- dijo Gustavo, quien tenia la cara completamente roja por la ira.
Los compañeros empezaron a buscar alguna salida en la habitación sin mucha suerte, la cámara estaba completamente sellada, parecía ser una cámara perfecta para jugarles una mala pasada.
-Todo fue tu culpa- dijo Carlos mirando a Gustavo, cuando ya todos se habían cansado de buscar una salida en vano.
-Perdón?- respondió Gustavo, te recuerdo que el de la idea de venir aquí fue tuya.
-Pero tú tuviste la estúpida idea de hacerle la broma, nos convenciste de hacerla.
-Todos lo hicimos no solo fui yo!- dijo Gustavo levanto la voz para defenderse de las acusaciones de Carlos.
Las acusaciones de parte de Carlos hacia Gustavo seguían y seguían a la par que los minutos se convertían en horas, mientras los tres compañeros solo miraban con la vista baja una pelea que para ellos, solo empeoraba la situación. Las horas pasaban y pasaban hasta que según el reloj de Gabriela ya eran las 8 pm.
-Tengo hambre- menciono Melissa para romper el incomodo silencio que acogía la cámara.
-Ese imbécil de Guillen, se esta pasando de la raya- dijo Gabo.
Gabriela miro con mucha curiosidad el misterioso cuadro con la mancha roja en el medio para luego añadir:
-Creo… que nos lo tenemos bien merecido.
-Tal vez…- dijo Gustavo- además que el sufriera un ataque demuestra que de verdad nos estimaba.
-O que era muy cobarde- dijo Gabo- nunca confié en el, me parecía muy anormal.
Gabo miro al techo, vio pequeños agujeros en el, fue muy extraño pues el no recordaba haber visto eso, sino solo marcas circulares. Parecía como si esas marcas se hubieran abierto, pero cuando estaba a punto de contarles a los demás, Carlos hablo:
-Fue algo… graciosa la broma…
Realmente no lo era, pero Carlos intentaba sacarles una sonrisa a los demás antes de dormir.
Todos, durante la noche, tuvieron la misma pesadilla; un recuerdo de una inocente broma que pudo haber terminado en algo trágico.
En el salón de la escuela, en un rincón, se encontraba Gustavo quien tenia un enorme hueco en el pecho, haciéndose ver como una herida de escopeta, Gabriela estaba mejor maquillada, ella había colocado un cuerpo parecido al de ella hecho de trapo tirado en el suelo, mientras ella estaba oculta entre cajas solo dejando ver su cabeza, pareciendo estar decapitada, Melissa estaba simplemente bañada en sangre, Carlos estaba colgado del cuello con una gruesa y oxidada cadena, mientras Gabo parecía tener graves heridas en la cara como si alguien le hubiera golpeado con piedras hasta deformarla.
En eso entra Guillen. La expresión de su rostro reflejo un miedo indescriptible al ver a sus amigos en una situación como la que veían sus ojos. Ellos no se aguantaron la risa, pero dejaron de reír al ver que Guillen no parecía estar consiente de la broma. Guillen empezó a temblar, ya ahora en el suelo mientras se agarraba el pecho. A la mañana siguiente, los 5 compañeros, con la mente mas clara, decidieron arreglar algunos asuntos.
-Oye- dijo Carlos a Gustavo- disculpa por lo de ayer.
-No hay problema socio, olvidemos esas tonterías.
Gabo se alegraba que los problemas no fuesen mas fuertes que la situación que ahora arropaba a los compañeros. Gabo miro al techo. Este ahora estaba lleno de gruesas agujas, al parecer habían salido de los orificios que se mostraban en el techo. Gabo miraba atentamente el techo, algo no estaba bien. En el momento de alegría, Melissa y Gabriela también se alegraron y se abrazaron con todos. En eso, la gigante rueda con cadenas empezó a girar. Entonces, la pared de la cámara fue traspasada por una brillante guillotina que paso velozmente por el cuello de Gabriela. La cabeza de la compañera rodo por los suelos mientras su cuerpo se desplomaba. Las cadenas de la rueda seguían haciendo ruido mientras se arrastraban por el suelo de la cámara.
El eminente grito de Melissa al ver lo que le había sucedido a su compañera, marco el inicio de una serie de movimientos internos en la cámara. Las paredes parecían moverse, como si una maquinaria interna la manejara detrás de las paredes. El charco de sangre que dejo el cuerpo de Gabriela se escurría por los pies de sus compañeros que miraban atónitos la terrorífica escena. Melissa empezó a correr hacia la herméticamente cerrada puerta de la cámara mientras se resbalaba continuamente con la sangre que se escurría del cuerpo de Gabriela.
De repente, la pequeña mesa de la sala se elevo para luego empezar a girar sobre su eje. La tabla de la pequeña mesa empezó a girar tan rápido que se disparo en grandes pedazos que salieron disparados hacia Melissa, esos pedazos se incrustaron dentro del cuerpo de Melissa reventando dentro de ella, provocándole hemorragias internas.
Los tres compañeros empezaron a correr desesperados por toda la cámara intentando buscar una salida, mientras los ruidos que emitía la maquinaria interior de la cámara seguían retumbando. La rueda seguía moviéndose, mientras la cadena seguía arrastrándose.
La rueda se detuvo para empezar a moverse en otra dirección. Mientras Carlos buscaba desesperadamente alguna escapatoria entre las paredes, la cadena jalo una parte del techo oculta en una rampa, de tal manera que este se aferro de el. El cuello de Carlos entonces quedo enganchado con la cadena ahora ya elevada hasta el techo.
El cuerpo de Carlos se movía desesperadamente por buscar algo de oxigeno pero cada vez que se movía la cadena le apretaba mas el cuello.
Gustavo no lo creía, que demonios estaba haciendo Guillen? Vengarse matándolos? Esto era una clase de broma? Acaso Guillen tenia que ver con eso? Gustavo se quedo paralizado por lo ocurrido mientras Gabo gritaba desesperado que se detuviera todo.
Las paredes seguían sonando. Entonces el cuadro con el punto rojo hizo un curioso sonido. Se escucho un «click» y el punto rojo de la pintura reflejo un laser hacia el pecho de Gustavo.
De pronto la escopeta que se encontraba detrás del cuadro disparo violentamente contra el pecho de Gustavo, dejándole un enorme orificio en su pecho. Fue ahí que la puerta se abrió. Gabo no lo pensó dos veces y corrió directamente hacia allí para salir.
Pero entonces empezaron los temblores; el suelo empezó a temblar violentamente haciendo que Gabo se caiga. Mientras la puerta se cerraba nuevamente el cuerpo de Gabo era golpeado consecutivamente por las protuberancias que tenia el suelo de la cámara dejando al cuerpo de Gabo bañado en sangre y completamente desfigurado.
Mientras Gabo agonizaba, pudo ver como el techo lleno de agujas, se acerco lentamente al suelo. Hasta que al llegar a la mitad, choco rápidamente contra el suelo, acabando así definitivamente con la agonía de los compañeros. Cuando el corazón de Gabo se detuvo, la puerta de la cámara de Guillen se abrió.
3 comentarios
Mucho gore pero poco miedo.
La Venganza Es Dulce y Fria , Entonces Si Es Fria y Dulce Entonces Es Helado 😀 Ok no Como dice el colega arriba bastante Gore pero no da miedo , solo se vengo de las jodidas bromas que le hacian Malvados :c
Le falta una mejor redaccion