Era la decada del 1930 y el padre de una familia muy adinerada falleció de un cáncer terminal, en su testamento estaba escrito: «Mi herencia se la quedará uno de mis hijos, pero será el ultimo que siga con vida, cuando el resto de sus hermanos estén muertos todo lo mio será para el»
Pues la herencia consistía de 500 millones de dolares y numerosos terrenos en diversos países de Europa, es por esta razón que los 6 hermanos (Juán [18 años], David [15 años], Carlos[14 años], José[12 años], Eduardo[9 años] y Eckbard[6 años] ) se sentían muy amenazados unos de otros, claramente el pequeño Eckbard no entendía mucho la situación y miraba indiferente a sus hermanos. David se dio cuenta de que sus otros hermanos ivan a intentar asesinarse los unos a los otros por la tentadora herencia y le dijo a Eckbard:
-Ten mucho cuidado con nuestros hermanos, probablemente intenten hacerte daño, nunca te descuides, se que no entiendes mucho, pero porfavor has lo que te digo.
Al pequeño parecio no importarle mucho lo que le dijo su hermano y solo asintió con la cabeza.
Al día siguiente encontraron el cuerpo de Carlos sin cabeza en el pasillo de la mansión en la que vivía esta familia, todos se quedaron atónitos y se podia notar claramente el miedo que cada uno sentía, estaban todos reunidos al rededor del cuerpo de Carlos intentando procesar lo que pasaba, hasta que, al cabo de unos minutos la madre de los niños se percató que faltaba el menor, esta se apresuró en llamarlo y apareció inmediatamente con la cabeza de Carlos en sus manos, mientras mordía uno de sus ojos. La madre muy asustada preguntó
-¡¿QUE HAS HECHO?!
–David me dijo que tuviera cuidado con mis hermanos, así que ayer cuando Carlos se me acercó yo tomé un cuchillo y le corté la cabeza, pero fue por medidas de seguridad, no quería que me hiciera daño
Juán, ya que era el hijo mayor, intento razonar con el menor, pero en cuanto se le acercó, este hiso un movimiento rápido y le sacó los dos ojos con sus propias manos, mientras Juán gritaba del dolor Eckbard tomó un tenedor que se encontraba cerca de el y se lo clavó en la yugular a su hermano mayor acabando así con su vida.
José, viendo como su hermano estaba fuera de control, rapidamente fue, lo tomó en brazos con gran dificultad, ya que este se resistía y lo lanzó por la ventana, la madre no podía creer lo que estaba viendo, esto era una verdadera ceremonia sangrienta y al no poder más ordeno a sus guardias que tomaran a los dos hijos que quedaban vivos y los encerraran en una habitación con constante vigilancia. Los guardias se apresuraron a cumplir la orden, tomaron a José, pero no veian a Eduardo por ningun lado
Despues de 30 minutos de buscar por toda la casa y no encontrar nada, se dieron cuenta de que la casa estaba quemandose y vieron por la ventana a Eduardo despidiendose de ellos diciendo
–No entiendo porque se matarón mis hermanos, y tampoco me importa, no me gustan las peleas y no me quedo otra opción que quemarlos, ahora no veré mas peleas, y también supongo que la herencia es para mi.
2 comentarios
Increiblemente apresurada la redacción, la historia de por sí daba para más, esta tan apresurado que en algunos momentos es necesario leer 2 veces, ya que parece faltar información y detalles.
La trama es interesante, algo que no he visto antes.
PD: Y por el amor de el dios que profeses, es «iban» no «ivan», al final del segundo parrafo.
Buena pero le falto muchisimoo