Escucha, observa…

cuida tu vida

3 DE MARZO DE 1996. 4:00PM

Apenas han pasado un par de horas desde que el agente de bienes raíces me entrego mi nueva casa, no es muy grande, parece haber sido construida a principios del siglo XX, esta muy deteriorada, y tiene un aire muy tenebroso. Pero que más podía esperar por tan bajo precio. A pesar de que ya sea poseedora de esta nunca había estado en el interior de la misma, fue mi esposo el que realizo la mayor parte del negocio. El no esta aquí ahora, ya que esta en “un viaje de negocios”. Bueno  la mayor parte del  tiempo esta de viaje, así que su ausencia ya no me pesa.

3 DE MARZO DE 1996. 7:30PM

Comienza a anochecer, mas vale que me apresure a limpiar un poco si quiero dormir temprano. El camión de la mudanza arribo apenas hace diez minutos, el encargado a notado mi enfado, pero su ayudante un chico blanco, con el pelo muy corto y de aproximadamente unos 25 años de edad  lo a compensado ofreciéndose a ayudarme a colocar los muebles. Efectivamente ahora estamos los dos solos en la casa, acepte su ayuda por que a pesar de una fea cicatriz en la mejilla izquierda, el joven no me inspira desconfianza en absoluto. Su nombre es Lester.

3 DE MARZO DE 1996. 9:00PM

Me duelen muchos los brazos y las piernas, por el arduo trabajo, a tal grado de q no me puedo mantener firme sin temblar. Es una horrible noche, afuera hay una horrible tormenta, y a causa de esta nos hemos quedado sin luz, lo único que nos alumbra son lámparas y velas colocadas por la casa. Al llegar a la caso no me percate de que había un viejo closet abandonado, al final del pasillo que conduce al baño, junto a un gran ventanal. Dentro de este no hay más que un viejo sombrero. No le doy importancia y decido q es hora de irme a dormir y debido al clima no me queda mas opción que dejar que Lester se quede. El no habla mucho solo se limita a contestar asintiendo con la cabeza, pero lo que no ha dejado de hacer es mirarme de una manera muy posesiva, cada vez que el piensa que estoy muy distraída.

3 DE MARZO DE 1996. 2:45AM

Mi vejiga me pide a gritos que valla a orinar, así que no me queda más remedio que obedecerla, cruzo el pasillo con mucho sigilo, ya que apenas puedo ver, por que lo único que lo ilumina es la luz que producen los frecuentes rayos que desprende la tormenta. Abro la puerta del baño y voy directo a lo que vengo. Trato de salir pero la puerta parece estar bloqueada del otro lado. Un sentimiento de claustrofobia de apodera de mi y comienzo a golpear la puerta desesperadamente. Se a abierto de golpe y lo que encuentro afuera es un hombre alto que al parecer acaba de salir del viejo armario, viste una gabardina y el sombrero, que en su cabeza ya no luce tan viejo. Cuando un rayo de luz lo alumbra entro en estado de shock, pasmada por el terror que me produce ver su cara completamente desfigurada, y llena de llagas sangrantes. Antes de que pueda gritar o correr escucho su agonizante voz que me susurra,  “Escucha y observa. Cuida tu vida”

3 DE MARZO DE 1996. 2:50AM

Mis piernas y mi garganta parece funcionar de nuevo, salgo corriendo por el pasillo, que es iluminado por otro rayo, esto me hace notar que el hombre ha desaparecido, salgo  hacia la calle y apunto de subir a mi auto noto un brazo sujetándome acompañado de un fuerte golpe en la cabeza, mi visión se nubla, aun así sé que estoy siendo arrastrada de vuelta a la casa, me lleva de vuelta a mi habitación y me arroja contra una cómoda, rompiendo es espejo de la misma en pedazos, cuando recupero el enfoque de las cosas, noto que es Lester el agresor,  que comienza a rasgar mi ropa y trata de forzar mis piernas para abrirlas. Estiro la mano, tomo un pedazo grande de vidrio y lo clavo en su mejilla izquierda. El retrocede y me da el espacio suficiente para poder escapar. Sé que me atrapara de nuevo si intento entrar en el auto así que decido esconderme en el baño para poder llamar a la policía. Antes de poder entrar llegar a mi destino, el me atrapa y sujeta del cuello apretándome contra lo que temo aun mas que su ataque en este momento… el armario. No sé que podría ser peor, que Lester me estrangule y viole, o que el horrible sujeto salga por detrás y se haga conmigo. Lester me observa con la mirada fija, mientras yo lloro y grito, no pidiéndole que me libere, más bien tratando de advertirle que no es bueno estar cerca del armario.

3 DE MARZO DE 1996. 3:00AM

Un Primer rayo me permite ver que su herida es muy profunda, y que esta decidido a acabar conmigo. Mientras comienzo a sentir que me desconecto del mundo por la falta de oxigeno, el me presiona tanto contra el armario que rompe la puerta y yo aterrizo en el fondo de este, horrorizada por lo que pudiera haber dentro. Un segundo rayo de luz me permite ver como el sujeto esta posado a espaldas de Lester y tiene una mano en su hombro. Mientras me reincorporo veo que Lester esta sufriendo la misma experiencia por la que yo acababa de pasar, pero aun pero ya que el hombre esboza una sonrisa demoniaca, que provoca que partes de la cara comiencen a caérsele en pedazos.

3 DE MARZO DE 1996. 3:02AM

En cuanto pude ponerme en pie Salí corriendo de ahí. Ahora enciendo mi auto, apenas puedo respirar y siento cada latido de mi corazón en mi cabeza. Escucho romperse un cristal y un sonido de algo aplastándose muy fuerte.

9 DE ENERO DEL 2000 2:33PM

Estoy apunto de salir de mi rehabilitación. Ahora sé que nada de eso paso realmente, todo fue algo creado por mi imaginación debido al estrés. El guardia me entrega las cosas que yo poseía al momento de ser internada en la clínica, noto algo inusual, entre ellas. Es un viejo recorte de periódico, con fecha del 4 de marzo de 1996. Con la noticia titular, que describía el hallazgo del cuerpo sin vida de un joven al pie de una ventana, la policía lo había calificado como suicidio, la nota contenía una imagen del muchacho. Se podía apreciar todo el lado frontal de la casa, con la ventana rota, y con ponerle un poco más de atención a través de un pedazo de cristal sucio se  podía observar la luz que produce una gran y brillante sonrisa y el destello de una mirada que parecía estar mirando al cuerpo debajo de la ventana. El joven tenía puesto un sombrero y una gabardina muy  viejos, estaba herido en la cara y en el pecho tenia escrito el con sangre el mensaje: “CUIDA TU VIDA”

Y tu siempre escuchas y observas???

 

 

 

 

creación propia

mauricio tinajero

Please wait...

2 comentarios

No entiendo qué tiene que ver la moraleja con la historia, aparte de que el mostro encapuchado la haya dicho. Esperé que se involucrara más en el argumento, no lo hizo. Tampoco entiendo por qué esta mujer fue enviada al loquero creyendo que todo fue su imaginación cuando la muerte sí fue registrada, e incluso se determinó una causa de muerte. No veo la reacción del esposo ante todo esto por ningún lado, ni le encuentro sentido a la existencia del tipo que la salvó.

Responder a DaPunsterCancelar respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.