El cartucho maldito de RE2

Hola, mi nombre es Jaime Hernández. Hace tres años que me la pasaba pegado a los videojuegos, tenia un Nintendo 64, aun recuerdo las horas que me divertía jugando Zelda, Super Mario 64 y ni hablar de Castlevania.

Tenia tantos cartuchos que podía nadar en ellos, la mayoría repetidos, pero los coleccionaba, solo me faltaba conseguir el Resident Evil 2 que era de mis favoritos y ya lo había jugado con otros amigos.

Un día, al salir de la secundaria, caminando tranquilamente a casa me encontré a un vendedor ambulante con una gran barba y capucha, que traía una bolsa llena de cartuchos, no pude contener las ganas así que me le acerque y le pregunté si traía el Resident Evil que tanto anhelaba y me dijo “claro, por supuesto, toma” y saco un cartucho que ya se veía muy decolorado y tenia escrito con plumón permanente “RE2 (nunca jogar, se você quer viver) “  luego continuo diciendo “el juego esta en portugués, pero por favor, por el amor de dios, no jueges el modo que sigue del real survival… Recuerda amiguito, la curiosidad meto al gato…” y se fue caminando, no le hice mucho caso y fui corriendo a mi casa.

En cuanto llegue a casa fui corriendo a conectar mi Nintendo 64 para calar el juego. Al principio dio problemas para poder reproducirlo porque ni soplándole funcionaba, pero después de cómo 25 intentos al fin estaba funcionando pero el ojo del menú principal pestañeaba, se me hiso algo raro pero no le di mucha importancia, ya cuando iba a escoger un nivel de dificultad el titulo rojo se empezaba a deslizar por dentro de la pantalla como si fuera sangre hasta pintar completamente el menú y no podía elegir nada. Prendí y apague la consola y de nuevo ocurrió. Repetí el procedimiento y dije “la tercera es la vencida, si no funciona lo tirare a la basura”, para mi mala suerte esta vez el titulo se esparcía hacia arriba, como si supiera mi anhelo por jugar, y el ojo de fondo estaba completamente cerrado, como cuando alguien esta dormido, era mi oportunidad y rápidamente fui a escoger el nivel. Estaba el –fáceis- que creo que era fácil, el –normais- que era normal, el -supervivencia verdade- que suplía al real survival y había un nivel de diicultad extra que decía -joga bem se quer viver- que no lo pude traducir debido a que mi portugués no es muy bueno.

Como soy muy bueno en estos juegos decidí comenzar a jugarlo en real survival pero se me hacia muy fácil y cometí la peor estupidez de mi vida…. Jugar ese modo joga bem se quer viver…. Que no me tome la tarea de traducir. El juego no me dejo escoger el nivel de violencia ni el color de la sangre como siempre lo hace, y en lugar del típico video  intro que salía en los otro niveles salía un video de unos como rituales voodo o satánicos donde había cráneos por todos lados, un pentagrama con fuego y un cartucho de N64 en medio, luego se puso la pantalla completamente en negro, luego estática, como cuando vemos la tele en un canal sin señal, y después salía Leon S. Kennedy en un escenario con fondo negro donde solo había un espejo, por el cual pasaba y al llegar del otro lado su cabello era negro y salía una pantalla que decía – sua vida está em risco- y después de la espera aparecía león cayendo desde una distancia aproximada a un metro hacia el suelo. Y aparecía  en un escenario que se me hacia peculiar, en el cual se observaba a un viejo barbón que tenia un negocio de chácharas, al caminar por el escenario las casas se me hacían muy conocidas, en eso salieron unos perros-zombie, peculiares del juego, que me hicieron correr por toda esa calle hasta que vi una puerta que se podía abrir y a toda prisa entre, el escenario de adentro se parecía a mi casa, pensé que era simple coincidencia así que entre a lo que parecía mi cuarto, y ahí me observaba en la pantalla, agarrado del control del nintendo cuando por la ventana empezaron a entrar unos perros y zombies que mordieron todo mi cuerpo, y sentía las mordidas en carne propia, con todo y el dolor que me acompañaba hice el intento de desconectar la consola y solo así paros el dolor que me provocaban sus mordidas y me desmaye.

Al día siguiente desperté en el hospital, con mis padres preocupados preguntando que había pasado, quien me había querido matar y yo les conté sobre el juego, pero me juzgaron loco, seis meses después me recupere de las tremendas y misteriosas mordidas que aparecieron de la nada. Tome un bate de beisbol y acabe con mi consola sin pensarlo dos veces, ahora mis padres creían que enserio estaba loco. Vendieron todas mis cosas y me metieron a este manicomio.

Les pido por favor, de la manera mas seria, que si encuentran ese cartucho lo quemen, lo tiren a un barranco, hagan lo que sea posible por desaparecerlo!… bueno, me voy, es hora de mi sedante, porque solo así puedo conciliar el sueño desde aquel oscuro día, que hace tres años viví…

By: 31pi5t0
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Martin