EL ARBOL DEL PARQUE

Él era el centro de nuestras incognitas. ese joven que se sentaba al fondo del anfiteatro de la facultad y escuchaba callado las clases y se retiraba en silencio una vez finalizada la jornada.

Mi grupo de amigos quisieron acercarse a él alguna vez durante las clases en las que formabamos grupos pero el nunca asistía. Él no era de interes para mi, lo que haya hecho de su vida en ese tiempo a mi no me interesaba, pero al parecer a carla, la unica chica del grupo de amigos, le atraia. Vaya uno a saber que le atraia de él, seguramente ese aire misteriosos. Simplemente a mi me parecia un idiota.

Aun así no le dejaba de llamar la atención al resto ya que, haga 45º de calor o 2º bajo cero, el iba vestido siempre con una capucha, cubriendo su cabeza, y resaltando su pálida faz. El tipo era un espanto viviente por su apariencia.

En fin, un día me lo encontré en el parque de la ciudad, yo iba caminando con mi novia, aprovechando que el clima estaba algo fresco,él estaba de espaldas a nosotros pero pude reconocer su bolso verde militar a lo lejos. Al parecer el no noto que yo  lo estaba observando, vi que giro la cabeza de un lado al otro como echando un vistazo a ver si alguien lo veía, luego se agacho y se metió en una estrecha cavidad localizada en un inmenso árbol. Eso me paralizo ya que una persona de sus dimensiones jamas podría haber cabido en esa cavidad. ahora si me vi interesado, mas que cualquier otro que yo conozca debido a que había presenciado algo realmente fuera de lo normal en él.

Mi novia noto que yo estaba con la mirada perdida hacia aquel árbol y me pellizco para que reaccionara, después de todo ella me estaba hablando antes de que yo viera eso.

Pasaron los días y me quede pensando, trate de darle una explicacion lógica, pero no había ninguna, así que decidí hablarle la próxima vez que lo vea.

Era un viernes por la mañana, el día estaba fresco pero soleado y lo vi a él que se acercaba a la puerta del anfiteatro lista para empezar la clase…lo seguí y me senté al lado suyo.

– hola, que clase es esta?- hice una pregunta estupida pero me serviria para abrir una conversacion

me miró y respondió – esta es la clase de deontologia- sus voz era grave y aspera algo gutural, que me dejo helado.

– ok, gracias- le dije

pase toda la clase al lado suyo sin dirigir palabra alguna. Una vez terminada la clase el salio apurado. Yo me levante al mismo tiempo que él y lo seguí de nuevo hacia el parque. por supuesto sin que el me notase, o por lo menos eso pretendía. entre los arboles del parque el chico se perdió, desapareció, me detuve al ver que lo había perdido de vista, cuando de mi espalda siento un golpe que me tira al suelo. Cai boca abajo, me di la vuelta y ahi esta él.

-porque me seguis???- pregunto en un tono agresivo

Me quede callado. Estaba realmente aterrado, sin embargo me puse de pie lo mire a los ojos y le dije. -cual es tu nombre?-. con una expresión que expresaba poca importancia a mi pregunta me hizo a un lado y siguio caminando.

– te vi la otra vez cerca del gran árbol de la plaza!!!-. le grite

Se detuvo y me pregunto que que había visto, le conteste que lo había visto escabullirse dentro de esa gran grieta que se encontraba entre las raíces del árbol. puso una cara de asustado y dijo – ya conoces una parte de mi, que nadie conocía, ahora conoce la otra!!!-.  no pensé nada en ese momento. Él se quito la capucha me miro fijo por un rato, luego cerró los ojos y su cabeza giro 180 grados mostrando un rostro repulsivo de boca redonda de dientes afilados, pequeños y brillantes ojos negros, y solo dos orificios nasales con forma de gotas. No puedo explicar mas, solo que senti una electricidad, me corría un escalofrio fulminante que enfrió mi cuerpo, Y como si la gravedad hubiese hecho una repentina presión sobre mi aflojandome las piernas. hice un paso para atrás en una misma maniobra el joven giró su cabeza mostrando su rosto normal. se puso la capucha y se echo a llorar.  Yo me aleje del lugar mientras lo veia llorar.

Volví a mi casa en silencio, sin saludar, sin ir a comer algo. me tire en mi cama y una inmensa tristeza me surgió.

Pasaron los dias y el joven nunca volvio a clases. Me tomo mucho tiempo juntar coraje y decidir ir a buscarlo. Cuando fui al gran arbol encontre su bolso y una nota sobre él la nota decia:

«dejame considerarte mi único amigo, me conoces mas de lo que yo algún día pude imaginar. Sin embargo por temor a ser buscado y destruido preferí abonar con mi cuerpo  la tierra y fertilizarla con mi sangre, un nuevo árbol crecerá de mis restos. No sirvo para vivir aquí como lo que soy, viviré mejor como lo que seré»

Paso un año después de eso y un árbol de interesante figura creció en una remota esquina del parque donde casi nadie lo ve, y solo yo lo pude notar