Cuerpo Putrefacto

Un cuerpo putrefacto.

Entre más corría, mi corazón se agitaba de manera sorprendente. Lo que Izzy me había contado ese día por la mañana me tenía mal.

–         Pero Mio, no miento, en este lugar hay entes malignos

–         Basta Izzy, creo que has pasado bastante tiempo jugando Silent Hill y Resident Evil, que ya estas mezclando la realidad con la fantasía.

–         Pamplinas, estoy seguro que es real. Allá tu si no me crees.

Mientras regresaba a casa, iba riéndome, recordando esas palabras. Pensar en entes malignos, monstruos, zombis, no tenía mucho sentido.

Al regresar a casa, la cual por cierto estaba vacía, subí corriendo a mi habitación, y busque como loca la única consola, que había comprado alrededor de  5 años atrás. Cuando por fin la encontré, entro en mí una inmensa sensación de jugar uno de esos juegos que Izzy tanto adora, para mi desgracia mi madre había tirado todos mis videojuegos.  Decidí entonces que tenía que ir a comprar uno, pero no iría como estaba vestida, en las tiendas de videojuegos siempre hay chicos lindos, y me gusta verme atractiva para ellos. Tomé un baño y decidí ponerme la ropa más friki con la que contaba. Me puse una playera de Pac-man, un overol de short y mis botas mineras, claro, no podían faltar mis lentes, sin ellos ni vería ni mi propia nariz.

Me encamine a una de las tiendas más prestigiosas de videojuegos de la ciudad, y justamente allí estaban Izzy, Siwon y Yuno, junto a una gran masa de personas alocadas.

–         ¿Qué es lo que está pasando aquí? – Pregunte – Están esperando el nuevo juego ‘The Dark Maiden’ se dice que será todo un éxito – replico Siwon

–         Yo digo que será bazofia, ningún juego puede ser mejor que Darksiders

–         Bueno Yuno, es la perspectiva de cada uno- finalizo feliz Izzy

Todo me parecía tan extraño, y me parecía aún más cuando la luz de la tienda se apagó, empezó a nevar, estaba temblando, amablemente Siwon me ofreció su chamarra y me la puse encima.

De repente un objeto brillante paso rozando la cabeza de Yuno, – Ahhhhh!!- gritó agachándose al ver que lo que había rozado su cabeza era una hacha, – Pero qué clase de modales son estos, si no nos quieren vender el juego que mejor nos lo digan amablemente – dijo Siwon.

Dentro de la tienda se escuchaban muchos ruidos, y en un parpadeo, una masa de gente se abalanzaba sobre nosotros. Estoy segura que no eran personas, no tenían piel, se podían ver sus músculos y articulaciones, era asqueroso.

Siwon recogió el hacha y salimos corriendo. Yo sentía que uno de esos entes, monstruos, zombis, no sé cómo llamarlo, estaba detrás de mí, pero el miedo me impedía girar la cabeza y seguí corriendo. Así ocurrió la primera muerte, el ente que estaba detrás de mí me arrebato el hacha y con ella decapito a Siwon, que iba a delante de mí, solo pude ver como su cabeza salió volando por los aires y su cuerpo se desplomaba en el suelo, cubriendo de rojo intenso la blanca nieve.

No pude soportar ver esa escena, así que corrí más rápido. Y así fue como sucedió la segunda muerte. El ente-monstruo que portaba el hacha, la lanzo con fuerza, hasta cortar por la mitad a Yuno, la mitad de su cuerpo cayó hacía un lado, el otro solo se desplomo, vi como sus intestinos salían y dejaban una espeluznante imagen sobre el blanco piso, cubierto de nieve.

Sentí asco, repulsión, odio, coraje, tristeza, me sentía impotente, no podía hacer nada, solo correr, me sentía desprotegida, Izzy ya iba muy adelante.

Seguía sin querer girar la cabeza, tenía miedo de que al girarla me decapitara o algo así. Corrí lo más rápido que pude hasta alcanzar a Izzy, y así fue como ocurrió la tercera muerte. El ente-monstruo esta vez no utilizo el hacha, si no que tacleo a Izzy con toda la fuerza que le fue posible, y lo aventó hacía una valla, en la cual quedó, por decirlo de alguna manera empalado. Era una escena grotesca, me parecía que no podía ser posible, Izzy había sido mi mejor amigo desde el jardín de niños, no podía abandonarlo, pero el ente-monstruo seguía detrás de mí, y estaba segura de que yo sería la última. Corrí lo más fuerte que pude, sin pensar en nada, sin pensar en nadie, aferrándome con fuerza a la chamarra de Siwon, pensando que él estaba abrazándome, protegiéndome, buscaba darme falso consuelo para poder continuar.

No sé donde me encontraba, no sé cuánto tiempo había pasado, lo único que sabía es que no quería morir.

Encontré refugio debajo de un árbol, sostenía con mi mano un objeto, no sabía que era, había perdido mis lentes en el transcurso. Giré mi cabeza para comprobar que ya nadie me venía persiguiendo, y así era, estaba todo solo.  Con un poco de remordimiento decidí regresar. Vi los cuerpos mutilados y empalados de mis amigos, me dieron nauseas. Regresé a la tienda de videojuegos, lo extraño, es que todo seguía igual, no había rastros de una estampida de gente, ni alguien que fuera corriendo. Regresé por el camino que me conducía al árbol en donde me refugie para ver si veía algo, y nada, solo logré encontrar una cosa, mis lentes. Regrese a casa, creyendo que allí estaría segura, subí a mi habitación, cerré puertas y ventanas. Al pasar rumbo a mi cama, frente a mí vi algo espeluznante, el ente-monstruo estaba encerrado conmigo, en mi habitación, ese monstruo sonreía macabramente, justo frente a mí, ese espejo reflejaba su maldad en los ojos, lo extraño del caso, es que ese ente, se parecía mucho a mí, quizá el monstruo, siempre fui yo. Le sonreí amigablemente al monstruo, tomé mi hacha y salí a comprar un videojuego. Estoy segura que no soy tan inmadura como Izzy, yo si se diferenciar entre la realidad y la fantasía.