Amor de Madre

En el correr de la vida nos encontramos con diferentes tipos de amor, amores que hacen bien, amores que duelen, amores que matan y amores que mueren por nosotros, pero ninguno se compara con el amor puro y real de una madre.

Colonia Nicolich, un pequeño lugar alejado de las grandes complicaciones de la gran ciudad, en un rinconcito distante y humilde de un pequeño país. Hace años que por este lugar circulan historias de amores fuertes como el acero, pero una en especial llama a atención de cualquier curioso que se cruce con este lugar.

Años atrás en este lugar nació un muchacho con una enfermedad en la piel, dicha enfermedad lo hacia poco agradable a la vista de la gente de la colonia, y como cualquier otra colonia, nadie estaba libre de los mas extremos prejuicios que dictaban los mas conservadores.

Muchas acusaciones se hicieron notar en contra de tan inofensiva criatura de dios, desde la posibilidad de que fuese el hijo de Satanás, pasando por cuestionar la bondad y la pureza de la madre, hasta llegar a supuestos ritos satánicos y maldiciones concentradas en el pequeño niño. La única verdad, era que a pesar de todas las especulaciones la madre de dicho niño, lo amaba mas que a nada, ese niño era un milagro divino, ya que la mujer era incapaz de tener hijos y ese niño había salido de su vientre, por lo tanto para esa mujer su hijo era el regalo mas hermoso del universo.

Muchas ideas mal intencionadas surgían día a día, pero la que mas fuerte se hacia notar era una que hablaba de un pacto demoníaco con el señor del infra-mundo por parte de la madre para poder concebir. Esta idea se hizo escuchar, se difundió, paso de boca en boca hasta llegar a ser casi una realidad indiscutible para la gente del lugar.

El padre del niño había sufrido un accidente laboral poco claro al tiempo de nacido el niño, por lo tanto tan solo quedaban la madre y su hijo. El vinculo que unía estas dos personas era tan fuerte y grande como el amor que se tenían, la madre veía a su hijo como el regalo mas hermoso, y a pesar de que el niño era tan solo un bebé, el amor que tenia por su madre era mas grande que cualquiera antes visto. Sin embargo nada de esto importaba a la hora de juzgar. La madre sabia que su hijo no podría ser feliz ni vivir en paz en ese lugar, sabia que debía irse, y sabia que debía hacerlo cuanto antes.

Una mañana la mujer salio de su casa y lo que vio hizo que su cabeza y su corazón se congelaran del espanto y de la rabia, las paredes de su casa tenían escritas diferentes leyendas y frases, habían amenazas, insultos, fragmentos de la Biblia, entre otras cosas extrañas y poco sanas.

La mujer entró, agarro a su hijo, lo abrazo con todo el amor que tenia y decidió irse en esa misma tarde, teniendo tiempo así de recoger sus cosas. Paso la tarde entera visualizando como haría para empezar una vida desde cero en otro lugar y muy pocas soluciones viables llegaron a su cabeza, pero nada de esto importaba la decisión estaba tomada, lo mas importante era la vida y la felicidad de su hijo.

Llegando la caída del sol, la madre agarro a su hijo cargo sus cosas y se encamino hacia la ciudad, rezando por la bondad del señor, justificando que tanto ella como su hijo, ya habían sufrido bastante y merecían estar tranquilos y merecían también empezar a ser felices.

No llego muy lejos su felicidad, dado que a los pocos metros de  salir de su casa un hombre le arrebato al bebe de sus brazos cansados y frágiles, y en frente de sus ojos sin que ella pudiese hacer nada, separo la pequeña cabeza del bebe de su cuerpo, realizando un corte profundo en el medio del cuello de la indefensa criatura, echo esto el hombre se echo a correr sin que la madre pudiera alcanzarlo, tampoco lo intentó.

La mujer desesperada corrió con lagrimas bajando por su rostro como ríos de tristeza hasta donde se encontraba el cuerpo sin vida de su tan preciado regalo de Dios, lo miro y sin mas se largo a llorar en medio de aquella calle desolada, sin esperanzas, sin futuro, apretando bien cerca de su corazón el cuerpo inerte y degollado de su hijo.

En pocos minutos esa cara llena de llanto y dolor cesó y se trasformo en un rostro sin expresión, lleno de vacío, paso a ser un ente. La mujer tomo la cuchilla que había utilizado aquel hombre despiadado, entro en su casa, busco hilo y aguja y lentamente e incapaz de sentir algún dolor comenzó a abrir su vientre con un suave y único movimiento de aquel filo asesino, pensando que aquel vientre maldito y apestado había arruinado la vida de su único hijo, la vida de aquel milagro del destino, echándose la culpa a si misma de la enfermedad y la muerte de su hijo. Lentamente y de manera casi mecánica, agarro la cabeza de su pequeño y la coloco dentro de su vientre al igual que el cuerpo, luego cosió la herida dejando dentro suyo el cuerpo degollado y falto de vida de su hijo para poder cuidarlo y protegerlo ahora si de manera permanente hasta el fin, para que nadie se lo pudiese arrebatar nuevamente, luego volvió a agarrar la cuchilla y la hundio en medio de su corazón para matar el dolor que ahí sentía.

Solo una vez la clavó dejándola reposar en su pecho ahora rojo y sin esperanzas, y solo eso fue necesario para acabar con su vida y con su miseria.

Días después fue que encontraron a la mujer muerta en el comedor de su casa con su hijo muerto dentro suyo, tanto los investigadores como la gente del pueblo pensó que la mujer había enloquecido, había matado a su hijo y se había suicidado.

Lo cierto es que dicen que la mujer nunca dejo Colonia Nicolich y que nunca la va a dejar, y que tanto odio y tristeza acumulados van a seguir esperando en silencio para atacar y hacer sentir lo que ella sintió, a todo aquel que juzgue de la misma forma que su hijo fue juzgado, para asi calmar su soledad y su sentimiento de culpa e impotencia.

Se dice que hoy en día gente que es discriminada o gente que sufre de abusos intentan comunicarse con la mujer que se presenta bajo el nombre de Nora «La Madre Incondicional», esta va con el abusador o con la gente que te discrimina o te aísla, y les hace sentir el mismo dolor y tristeza que ella sintio al perder a su hijo delante de sus ojos, mas el dolor acumulado que tu sientes, hasta llevarlos a una locura irreversible, lo único que pide por su servicio es la cabeza de un muñeco de bebe con gotas de la sangre del que invoca forrado con una tela o lona cosida para que la cabeza no salga de ahí adentro.

El Precio es Bajo, la Recompensa es Buena.