Fiesta

Es la primera Creepypasta que envío, gracias por sus criticas positivas y negativas, espero su aceptación y que esta historia les sea de su agrado.

Ese día desperté alrededor de las 11a.m. con un terrible dolor de cabeza y lo que seria un moretón muy inflamado y morado en la pierna, estaba muy confundido y mareado.

La noche anterior salí de fiesta con tres amigos. Enrique, Pablo y Emanuel.

Los cuatro quedamos en vernos en casa de Pablo a las 10p.m. para arreglarnos y salir a una fiesta en casa de una amiga, la cual nos gustaba mucho a nosotros pero todos juramos que por nuestra amistad ninguno le diría nada y nos quedaríamos con las ganas.

En casa de Pablo, por hay de las 11:30p.m. Ema saco de una mochila un poco de marihuana, de nosotros los únicos que fumaban eran Ema y Pablo así que Enrique y yo nos negamos, pero entre el relajo y la diversión nosotros lo probamos. Al poco rato nos encaminamos a la fiesta, todos íbamos muy alegres y gastándonos bromas, por otra parte Enrique se sentía muy mal, en el camino se tiro al suelo y empezó a decir que quería regresar a su casa, todos lo levantamos y en una fuente le mojamos la cara, -Esto esta mal.- decía mientras tratábamos de calmarlo, a los 10 minutos por fin se tranquilizo y seguimos con nuestro camino, ya mas tranquilos y con el efecto de la hierba casi terminado.

Antes de entrar a la casa todos nos observamos y repetimos nuestra promesa juntando nuestras manos. Dentro de la casa todo iba normal, cada quien se fue por su lado y de vez en cuando nos encontrábamos, no se muy bien la hora pero en un momento vi a Pablo bajar las escaleras hacia el sótano tomado de la mano de la chica que nos gusta, yo muy enojado y con varios tragos encima, busque a mis amigos para decirles lo que estaba pasando. Solo encontré a Ema y entre los dos tratamos de buscar a Enrique, al no dar con el, nos decidimos a bajar al sótano para hablar con Pablo… Muy mala idea.

Los dos estábamos muy celosos pero mas que nada enojados porque el había roto su promesa, al bajar, alguien cerro la puerta y al no poder abrirla de nuevo decidimos seguir en busca de nuestro “amigo”. Al bajar completamente las escaleras nos encontramos con una cortina negra, al pasar por ella todo lo vimos de un color rojo, casi parecía sangre, pensamos que se trataba de un estudio para revelar fotos, pero estábamos equivocados, aunque no tanto, en ese lugar se encontraba una bañera en medio de la habitación llena de agua con lo que serian unos trapos dentro de ella, en las paredes habían pedazos de telas rasgados eh hilos que iban de pared a pared, impidiendo nuestro paso. Al final del cuarto había una puerta, al llegar a ella Ema me detuvo de abrirla y me dijo que mejor nos regresáramos, que esto ya lo estaba asustando, le dije que no podíamos hacer eso, por mucho miedo que tuviéramos, esto se veía muy raro y teníamos que encontrar a Pablo y saber donde estaba Enrique. Los dos nos tomamos de las manos para darnos valor, gire la perilla y entramos.

No recuerdo muy bien lo que paso después de entrar en ese cuarto, solo se que me duele la cabeza y el moretón en mi pierna es insoportable. Creo que tomare una pastilla y luego iré a casa de Enrique ya que vive a dos cuadras de la mía.

-Enrique!. Enrique!- Llame a su puerta sin que nadie me abriera, sus padres de seguro no estaban y tal vez el seguía dormido. Llame a su celular pero no me contesto el, era Pablo. Me dijo que el y Enrique se habían quedado en la fiesta a dormir, me dijo que fuera a buscarlos porque enrique se sentía muy mal.

Pase primero a casa de Emanuel y al llegar lo encontré tirado entre los arbustos, lo levante y al despertarse empezó a gritar y a llorar como nunca antes.

-Ema! Ema! Tranquilo! Ema!- Lo abrace y le dije que todo estaba bien.

Cuando se tranquilizo le pregunte que fue lo que había pasado, el, muy asustado, me dijo que Enrique tenia razón, que todo estaba mal, el había previsto lo que sucedería. Yo espantado y confundido le pregunte que fue lo que había sucedido,  el solo comenzó a llorar y me dijo que, después de entrar a esa habitación, algo nos ataco.

Palabras de Emanuel:

Tu caíste al suelo dando un fuerte grito, yo te arrastre hasta la mitad del primer cuarto, “eso”, que estaba en la otra habitación, no quería que entráramos pero tampoco tenia la intención de que saliéramos, solo podía sentir como eso se preparaba para salir y matarnos, o lo que fuera a hacernos. Trate de levantarte pero estabas inconsciente, en ese momento alguien entro y bajo las escaleras corriendo, era Enrique.

-Entonces que paso, que le paso a Enrique, a Pablo, como salimos de ahí.- Le pregunte con desesperación y el solo me dijo que Enrique se abalanzó contra la habitación y al entrar grito que nos marcháramos de ahí, la puerta se cerro detrás de el y solo pude escuchar un grito y algo que parecía ser un saco de carne azotándose contra la puerta cerrada.

Enrique me levanto con todas sus fuerzas y como pudo me saco del sótano, al subir a la casa, ya no se encontraba nadie en ella.

Me dijo que pidió un taxi para que me llevara a casa y uno para el, pero cuando llego a su casa se desmayo entre los arbustos por el cansancio. –Por esa la razón de encontrarlo ahí.

Los dos no podíamos creer lo que paso, pero sabíamos que eso si había sucedido, o eso era lo que pensábamos. Le dije que hace un rato llame al numero de Enrique y que Pablo fue el que me contesto y que quería que fuéramos a buscarlos a la fiesta porque allá se encontraban, Emanuel muy asustado me dijo que ya no queria regresar a esa casa pero que Enrique nos había salvado la vida y teníamos que saber que estaba pasando.

A una cuadra de la casa se encontraban varios vehículos de la policía y ambulancias, nosotros al verlos nos acercamos y le preguntamos a un oficial que fue lo que sucedió. El nos dijo que si conocíamos la casa y al decirle que anoche estuvimos en ella en una fiesta pero nos habíamos retiramos temprano el oficial nos dijo que lo acompañáramos, nos sentó en la acera y comenzó a decirnos una serie de preguntas. Al terminar nos pidió que lo acompañáramos a ver algo, nos acercó a la ambulancia y un medico abrió una bolsa de plástico enorme, en ella observamos con horror el cuerpo de Pablo, totalmente ensangrentado y en otra se encontraba el cuerpo de Enrique. Le dijimos al policía que si los conocíamos, que de echo que eran amigos nuestros pero, para que nos creyera, le dijimos que  se quedaron y no se quisieron ir con nosotros.

Nos tomaron nuestro datos y nos dieron la orden de irnos a nuestras casas, pero antes le pregunte que si sabían que había ocurrido, el señor solo nos comento que un loco se metido a la casa durante la fiesta y, bueno ya saben que sucedió.

Al momentos de irnos solo le dije una ultima cosa, -¿Dónde encontraron los cuerpos oficial?. El oficial me respondió. –En la sala, ¿Por qué? ¿Sucede algo?

-¿Pero no encontraron nada en el sótano?. Le pregunte con temor, a lo que el me respondió. Esta casa no tiene sótano muchacho, ¿Te encuentras bien?.

Me quede en blanco y solo le dije que si, que todo estaba bien, que había bebido de mas en aquella fiesta. El solo sonrío y nos despidió diciendo que no nos metiéramos en problemas.

Aun no puedo creer lo que paso. Ema me dijo, antes de entrar a su casa, que esto no se lo contáramos a nadie, yo asentí con la cabeza y le respondí que nunca mas volverían a ir a una fiesta.

Han pasado 3 años y todas las noches sueño con aquella habitación y solo puedo escuchar unos pequeños murmullos que me dicen que vaya a esa casa.