Yo era una chica normal, como cualquier otra persona. Tenía a mis padres, a mis hermanos, los amigos de mis hermanos y a mis propios amigos. Lo normal en una chica secundaria de 15 años.
Siempre me consideraron una chica pacifista y nada fuera de lo normal. Como se puede saber soy una chica totalmente amorosa y cariñosa. Hasta con mi novio John, pero últimamente no me presta mucha atención.
En la clase trato de acercarme a él, pero simplemente me ignora y se deja llevar por una chica de mi clase llamada Marrieta. A Marri siempre le gusto mi novio John, desde el primer momento en el que andamos, en nuestra primera cita en el parque. Prácticamente, también estaba con Marrieta, no se por qué diablos la llevó a nuestra cita. Pensé que eramos ambos solos pero sin embargo los encontré a los besos.
El 15 de Marzo fui a verlo a su casa, pero su madre me dijo que no estaba, algo extrañada por verme me preguntó mi nombre.
—Señora Choul, soy yo. Jullie. La novia de su hijo.
—Imposible, su novia es Marrieta.
E instantáneamente me cerró la puerta en mi cara, pero pude escuchar que del otro lado de la puerta marcaba el teléfono. Reconocí el sonido de las teclas: 5-5-8-6-2-2-2-0-6-3.
Sonreí por que el número que marcó es el de su hijo, mi novio, mi futuro esposo. Pero me enfadé al oír como le gritaba.
A la mañana siguiente John faltó a la escuela. Al parecer su madre tuvo un accidente y su carro calló por un barranco. Fue una pena para mi querida suegra.
Al salir de la escuela, al día siguiente, fui a la casa de mi novio y la puerta estaba cerrada por lo que me fijé por la ventana. Estaba él desconsolado llorando en el sofá, con la cara roja y los ojos hinchados, mientras le caía un poco de baba de la boca por la fuerza del llanto. Se veía hermoso ese día. Pero lo único malo fue Marri, quien lo consolaba a su lado.
Me enojé mucho y la seguí hasta su casa para reclamarle que hacía con mi novio, y que no debía jugar con él por que es de mi propiedad, y nadie lo debería de tocar.
Al día siguiente llegó el maestro Jarris a darnos la noticia de que nuestra compañera había muerto, me quedé en shock, ¿como podía ser que Marri habría muerto? Me largué a llorar junto con varías personas.
—Marri me caía tan bien.
Pasaron semanas y John volvió con un nuevo ánimo, estaba más fresco y con más liviandad luego de ambas muertes. Pero, también se puso a reír con una compañera de mi clase, y me dí cuenta que él era muy hermoso para todas ellas, por lo que decidí que si no era mío, no era de nadie.
Día de hoy bajó al sótano, a llevarle un vaso de agua a mi novio, hace cinco años que nos fugamos juntos. Pero extrañada de que la policía me busque por el triple asesinato decidí esconderme en esta casa en el campo. El olor a muerto la ha impregnado y las nauseas que me provocan son horribles.
John estaba dormido por lo que no decidí despertarlo, solo le dí un beso en los labios que con el tiempo fueron tornándose color morado con carmín y sus ojos abiertos de tono blanco y rojo. Pero hice todo por que se quedara a mi lado, si no hubiese tratado de escapar, no hubiera tenido que dispararle.
2 comentarios
que historia tan decadente, no tiene nada de sentido, la narracion es pesima, no concuerda nada, la verdad que no se que quiso escribir. Le di el puntaje mas bajo
Los 3 ultimos parrafos deberian ser suprimidos.