Era un día normal como cualquier otro. Me quedé trabajando como de costumbre en mi estudio hasta muy noche, mi familia me esperaba en casa. Como siempre lo hacía, al final de trabajar me conectaba en mi red social para enterarme de las últimas noticias del día. Una vez terminada mi labor me disponía a irme cuando de repente un amigo, al que no había visto en muchísimo tiempo, me habló por chat. Al principio todo fue normal, nos saludamos, platicamos de los viejos tiempos, me conto un poco de su vida y todo iba bien hasta que de repente me pidió un extraño favor… me dijo que necesitaba hacer una llamada urgente pero que a esa hora no podía conseguir un teléfono. Como siempre habíamos sido muy amigos le dije que sí, que me dijera el número, entonces el número que me dijo se me hizo muy raro, pues la lada del principio no pertenecía a mi país pero no le di mucha importancia a eso y marqué el número, entonces sin sonar ninguna vez el teléfono, me contestó una extraña voz, no parecía humana y no pude distinguir lo que me decía pues era un idioma que jamás había escuchado, me espanté mucho y colgué porque creí que me había equivocado de número, y al momento de regresar al chat para contárselo a mi amigo él ya no estaba. Aun sin preocuparme mucho apagué mi computadora y en el momento en que me disponía a salir de mi estudio se volvió a encender de la nada, las luces se apagaron y en el monitor apareció una extraña imagen de fondo donde se veía un cadáver degollado y el número que me había dicho mi amigo estaba escrito con sangre en un muro, entonces intenté cerrar esa espantosa imagen pero no pude, en vez de eso se empezó a reproducir un video, donde aparecía una persona encapuchada hablando el mismo idioma del teléfono entonces, al final apareció una advertencia escrita con sangre al igual que el número en la pared pero lo más raro es que pude entenderla perfectamente, decía algo como: “si no compartes el número no podrás salvarte”. Horrorizado salí corriendo del estudio hacia mi casa. Cuando llegué todos en la casa ya estaban dormidos y sin pensarlo más me acosté en mi cama y me dormí. Hacia un frio tremendo y tuve un sueño muy extraño, soñé con mi amigo, nos saludábamos casualmente, platicábamos, pero de repente todo cambiaba, de repente la persona con la que estaba ya no era él, sino que era el mismo cadáver degollado que vi en la imagen, y me hablaba con una voz tenebrosa en aquel extraño idioma y se iba acercando a mí poco a poco hasta que de pronto desperté asustadísimo, pero al ver a mi esposa durmiendo a un lado me tranquilicé y supe que solo había sido un sueño causado por el extraño suceso que me había pasado la noche anterior. No pude volver a quedarme dormido por miedo a volver a tener una pesadilla y me quedé así hasta que amaneció, cuando de repente, sin darme cuenta me volví a dormir y escuché a mi esposa y a mis niños llorando y entonces desperté. Corrí a ver que ocurría pero por mas que les preguntaba no me contestaba ni me hacían caso, parecía que yo no estuviera ahí. Todo era tan extraño, pero mis dudas se aclararon cuando escuché en las noticias del televisor, que un licenciado había muerto brutalmente en su estudio la noche anterior, que al parecer lo habían atacado con mucha furia pues lo habían degollado completamente y habían destrozado todo su cuerpo y que con su sangre estaba escrito: “por fin pude compartir el número”.
Ahora la policía investiga este brutal caso pero aun no se encuentra al culpable, mas sin embargo yo solo te pido un favor…. cuídate mucho, porque en cualquier momento puedo pedirte que márques un número por mi…
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Murder Corpse