Escaleras

Vivo en una ciudad marginada por el crimen, en las calles si no sales acompañado lo mas seguro es que alguien te dispare y te quite todo lo que traes, llegando a mi casa debo ponerle los 5 seguros a la puerta para asegurarnos que no nos roben, todos duermen con las ventanas cerradas y tapeadas, a por cierto alado de mi cama hay una pistola por protección. Un día unos amigos me invitaron a un bar, los bares son los únicos negocios que prosperan, parece que la gente le gusta desahogar sus penas, yo acepte para cuidarlos ya que la verdad nunca tomo.

El Devil famoso bar del sitio, famoso por su bebida infierno, dicen que tomarla solo se compara como visitar el infierno y regresar, mucha gente que a pedido un vaso termina en el hospital por intoxicación masivo, muchos le han preguntado al cantinero que contiene mas el solo responde «secreto de la casa». La segunda cosa por la que es famoso el bar es por las historias que cuenta el cantinero, historias de miedo para atemorizar a los borrachos. La noche se hacia vieja y mis amigos ya estaban lo suficientemente ebrios y el cantinero procedió a contar la historia de la noche

«Como todos saben esto antes era una ciudad común, ni rica ni pobre tan solo normal, en ella vivían hombres trabajadores y honestos que lo único que querían era progresar en la vida, aunque eso era muy difícil aquí, un día un hombre rico y poderoso vino a la ciudad ofreciendo algo mejor para todos, el dijo que traería tecnología, hospitales, escuelas y todo lo que necesitáramos la única condición es que nadie tocara la cueva roja una famosa cueva de esta ciudad denominada de esta forma por color de sus paredes, todos aceptaron sin dudar.

Al año todo había cambiado, grandes edificios se alzaban hacia el cielo, hospitales modernos y amansados curaban enfermedades y que se diga de nuestras escuelas, eran las mejores del país; lo único que nos faltaba era comunicación. Decidimos hacer un metro subterráneo y al cabo de un mes la obra ya casi estaba terminada, el único problema es que el metro forzosamente tenia que pasar por la cueva roja, ya que esta como prácticamente esta en los limites de la ciudad, seria útil cuando vinieran los visitantes; obviamente todos consultamos con el hombre de negocios, pero parecía que el había salido de viajes, su mayordomo solo nos dijo que el trato era no tocar la cueva roja, pensamos que el hombre quería conservar ese lugar por alguna razón sentimental, así que en ausencia de el decidimos comenzar la obra pero dañando mínimamente la cueva, todo lo construido fue sobrepuesto en la cueva, esta al ser de piso lizo realmente ayudo a no hacer muchos cambios para que fuera estación de metro, terminamos en tan solo 15 días el resto de la obra.

El día de la inauguración todos estuvimos presentes, toda la ciudad estaba emocionada, derepente un raro y perturbador se oye al fondo y vemos como el hombre de negocios se hacer sonriente a la cueva, pero aquella no era una sonrisa de felicidad, era como una sonrisa de odio y de desprecio, el se subió al metro, al cerrar las puertas observamos como saco un cuchillo mientras empezaba a reír sádicamente, tratamos de detener el tren antes que partiera pero nos era imposible ya que, el tren estaba programado para hacer un recorrido por toda la ciudad sin paradas, oíamos las risas en cada estación, los gritos, los llantos, las suplicas de misericordia, y aquella sonrisa incesante, notamos en algún momento que ya no se oían risas, mas sin embargo se seguían escuchando gritos de dolor, poco a poco fuimos cerrando los accesos a las estaciones solo dejando la ultima abierta, esperando que el metro llegara toda la policía y los valientes estaban ahí esperando que aquel monstruo llegara para exterminarlo, todas las puestas del vagón estaban bañadas en sangre y no se distinguía nada, cuando se abrió las puertas nadie lo podía creer, aquel hombre de negocios despedazo con sus propias manos a la mayoría de pasajeros del metro, nos dimos cuenta pos la cabeza marcada con una sonrisa del cochillo, los policías empezaron a disparar inmediatamente, pero el hombre no caía, veíamos como las balas le atravesaban el cuerpo destrozando todos sus órganos pero el no moría, todos escapaban desesperadamente, la policía cerro la ultima puerta finalmente, aunque todos seguían adentro, mientras ellos veían como aquel hombre le arrancaba miembros a las personas con sus manos, todos los policías se encargaron de tapear el lugar, posteriormente se hizo una investigación en secreto, revisando la casa de aquel hombre de negocios encontraron en medio de la alfombra principal el cuerpo de su mayordomo desfigurado de la cara dentro de una estrella de 12 puntas, los policías decidieron quemar el lugar con ellos dentro, la noticia fue cambiada a que una vela había provocado un incendio en la casa de aquel hombre y los policías murieron intentando un fallido rescate, lo del tren lo disfrazaron de una fuga de gas que había provocado una intoxicación de parte de todos los presentes, así que tuvo que ser sellada. La noticia se dejo de contar y la gente empezó a olvidar, pero aquel monstruo sigue ahí, esperando.»

Todo el bar se quedo callado y el cantinero nos pidió que nos fuéramos ya que empezó a nevar derepente, mis amigos intrigados por la historia decidieron ir al metro abandonado a ver que había pasado ahí, yo los disuadí de no ir, pero ellos no escucharon, los acompañe para cuidarlos, ya que lo mas probable al estar solos y ebrios caminando por la noche en esta calle lo mas seguro es que los asaltaran, llegamos en un taxi a la entrada tapeada principal de metro.

Quitamos el manto que protegía del escape del gas, movimos algunos lockers y mesas que bloqueaban la entrada, y finalmente con un tubo de metal rompimos el candado oxidado, a ver tan solo las escaleras me quede perplejo, era una oscuridad abrumadora y los escalones de madera viejos estaban todos manchados de sangre, lo bueno de ser fotógrafo es que siempre traes una cámara, tenia miedo así tome una foto rápido y sin verla guarde mi cámara, empezamos a bajar cuando derepente un escalón se rompió cayendo un amigo, todos nos quedamos quietos y atentos no podría ser que correríamos con la misma suerte, mi amigo empezó a gritar de terror al ver que a su alrededor se encontraban miles de huesos manchados en el piso tapizado de sangre seca, derepente un escalofríos invadió mi cuerpo al oír una risa malévola que se oía al fondo, vimos rápidamente como una sombra tecleaba a mi amigo llevándoselo a la sombra seguido de un grito desesperado de dolor, subimos rápidamente pero esa cosa de la nada agarro por el escalón roto a otro de mis amigos, el se aferra al barandal y gritaba que lo encerrara corrí rápidamente a la puerta, atore la entrada con el tubo de metal cuando oí un sonido penetrador, aquella cosa le había quitado la pierna a mi amigo, podía ver la sangre chorreando de su pierna, y el seguía aferrado al barandal y con un ultimo grito dijo ! ENCIERRALO, volví a tapear todo y me fui corriendo de ahí. Ahora después de mostrarles mi historia podré por fin olvidarme del recuerdo esa cosa para siempre, quien diría que la revolver de mi cama serviría para matarme a mí y no a alguien mas, ahora me despido con la prueba de mi relato aquella foto que tome.

Prefiero no recordarlo

Mangendro