Una fría madrugada de ida a el colegio mi primo y yo pasábamos cerca de un potrero desolado ¨Según decían los vecinos allí se celebraban rituales satánicos¨ allí encontramos una hoja que decía los acordes del diablo, luego los guarde en mi maleta ¨más tarde lamentaría haberlo hecho¨ y seguimos nuestro camino.
Ya de vuelta del colegio fuimos con unos amigos que sabían tocar música ¨nosotros tocábamos la guitarra¨, a media noche fuimos a tocar esa maldita partitura. Era muy compleja pero a eso de las tres de la mañana cada uno tenía su parte luego acordamos tocar todos juntos, apenas terminamos la primera parte sonó el teléfono y una voz muy aguda parecida riéndose nos dijo: no se metan con lo que no deben, luego colgaron, lo tomamos como la broma de alguno de nuestros compañeros. Cuando terminamos de tocar vimos una luz amarilla en medio del cuarto luego esta se torno roja y atreves de ella se oyó un rugido seguido de un se los advertí luego escuchamos una explosión, la casa estallo en llamas el fuego tomo forma de una cabra con cuatro pares de piernas que nos siguió por toda la casa quemando lo que había cerca de ella, mi primo y yo salimos por pura suerte pero los demás no tuvieron la misma suerte. Apenas salimos yo me desmaye, desperté en el hospital y me dijeron que toda mi familia estaba muerta y que yo y mi primo habíamos sufrido quemaduras graves.
A la semana me dieron de alta, mi primo dijo que no quería seguir viviendo con aquello que había provocado ese accidente y se corto las manos. Lo llevaron de urgencias a un hospital donde se salvo (según los doctores de milagro) y luego salió a una institución mental.
Yo aun lucho por seguir cuerdo.
8 comentarios
Buena, pero corta
Me gusto
algo corta pero no le quita lo bueno 🙂
esta buena
me gusto, bastante original 4/5
Le quedo aspero c;
Me gustó el cuento, aunque el final esta un poco tela
Ocurre todo demasiado deprisa… creo que podrías tomarte un poco más tiempo en contar lo que ocurre. Sin que llegue a ser demasiado larga.