Una Visita Inesperada

Era un 15 de Mayo en una granja a las afueras de una gran ciudad, David, el granjero hacía todo lo posible por mantener vivas las cosechas en una de las peores sequías en esa década, aunque los tiempos eran duros con mucho esfuerzo y apoyo de su familia el había conseguido mantenerse en pie y lograr abastecer de comida a casi toda la ciudad, todos los admiraban por ello.

David al terminar la jornada diaria se dispuso a entrar en la cama, poco a poco sus ojos se cerraron y su mente dejó de pensar en lo que tenía que hacer mañana, se dejó llevar por la dulce comodidad de su cama mientras la luz de la luna iluminaba tenue mente su habitación en color azul, pronto los sonidos de los insectos nocturnos dejaron de sonar en su mente, de forma tranquila se dejo vencer por el sueño, su ultimo pensamiento fue lo gratificante y placentera que era su vida, por que el esfuerzo que ponía en su trabajo lejos de hacerla estresante, la hacía realmente placentera para el.

Al despertar todo continuó de forma normal, después de lavarse los dientes y hacerse un desayuno se dispuso a empezar su jornada revisando el granero, pensaba en pocas horas encontrarse con sus trabajadores y asignarle sus labores correspondientes del día, pensaba básicamente hacer lo que hacía todo el tiempo, pero ese día se convirtió en todo menos un día común. Rápidamente tomó las llaves del granero y con paso rápido fue hasta la gran estructura, fue toda una sorpresa para el encontrarse con pilas y pilas de la comida que había almacenado durante meses en dicho lugar.

Hay que aclarar algo, David tenía un peculiar sistema de trabajo, el cada mes almacenaba grandes cantidades de comida en su granero, en una fecha establecida a su conveniencia un gran camión venía y se llevaba la comida a la gran ciudad abriendo el granero con una llave que David le había dado, lo extraño era que la comida seguía ahí, esto era peculiar, jamas había faltado alguna ves el camión y menos en fechas tan duras. Inicialmente David sintió intranquilidad, mas sin embargo después de razonarlo un poco llegó a la conclusión de que tal ves simplemente había olvidado la fecha, quizá la noche de ese día vendrían a buscar la comida y el se despertaría a mitad de la noche solo para decirles que hicieran menos ruido, no había de que preocuparse.

David alimentaba a los cerdos cuando se percató de la hora que era, ya era medio día y debían estar pasando su noticiero favorito, el rápidamente soltó el cubo y corrió hasta su caza a encender la TV, se sentó cómodamente en su sillón y presionó el botón de encendido del control remoto, la TV no respondió. David pensó que quizá el control ya no tenía baterías, mas sin embargo descartó esta teoría cuando al intentar encender la TV manualmente esta simplemente permaneció apagada, entonces notó algo que había pasada por alto toda la mañana, ningún aparato eléctrico encendía, esto fuera normal si no contáramos que los que funcionaban con baterías tampoco encendían, simplemente cualquier rastro de electricidad estaba ausente en esa casa, eso a David no le gustaba.

Ningun trabajador apareció aquel día, está demás decir que David estaba aterrado, sin auto y sin contacto con el exterior David estaba confinado a su propia granja, el solo pensar en esto hacía que su piel se pusiera como de gallina, extrañas alarmas en su mente hacían que se sintiera en un peligro mortal, ¿Pero de que peligro? el no lo sabía, pero tampoco iba a arriesgarse, en ese mismo momento cargó su escopeta y la puso cerca de su cama.

Al llegar la noche David entró a su cama casi sin poder dormir, el sabía que la falta de contacto aquel día no podía ser normal, pensaba que estaba preparado para cualquier cosa que sucediera esos instantes, por ende intento llamar a la poca tranquilidad que aún tenía y se dejó llevar por el sueño, todo fue tan solo para ser despertado poco después de medía noche al escuchar como la puerta principal se abrió de golpe. David cargó su escopeta y con cautela se acercó a la sala, la puerta principal dejaba entrar un pequeño rayo de luz que le permitía observar pequeña parte de la sala y otear el poco horizonte, ningún rastro de algún intruso pensó, pero que equivocado estaba.

Al caminar sin hacer ruido por la sala una extraña sensación apareció sobre sus pies, era como su estuviera caminando sobre alguna especie de pasta viscosa que se pegaba a su suela y que producía un sonido parecido a un chasquido que sonaba cada ves que tocaba el suelo, una serie de rayos iluminaron por pocos segundos la escena permitiendo ver a David lo que sus pies tocaban, se llevó las manos a la boca para no gritar cuando lo vio. Viseras, viseras de vaca que se extendían por todo el piso y por ende en el camino que el había tomado, lo poco de piel que quedaba había sido dejada poco mas adelante y detrás de esta un camino de intestinos, músculos desgarrados y sangre tapizaba todo el suelo, el camino iba hasta el pasillo que llevaba al baño.

David se dispuso a salir de la casa y correr hasta la carretera, en ese punto correría hasta alguna granja vecina e intentaría encontrar alguna clase de ayuda, alguna clase contacto, algo que le diera seguridad y ayuda, pero entonces un ultimo rayo cayó del cielo e ilumino por ultima ves la escena, al levantar el rostro vio la cosa que avanzó mientras el pensaba en un plan de escape, la cosa lo observaba fijamente con sus profundos y pequeños ojos que brillaban en color azul.

Un extraño ser con forma humanoide lo miraba desde la entrada del pasillo, sus largos brazos de tres dedos estaban manchados de sangre al igual que esa cosa similar a una boca mientras sus extrañas piernas se acomodaban de forma que se disponían a avanzar hacia David, el soltó su escopeta y salió corriendo en dirección a la salida. Un David casi en shock corrió por todo el campo, los sonidos que producía la cosa era similares a risas, risas que se burlaban de David y se acercaban cada ves mas.

Un cansado David se horrorizó ante la visión de todo el ganado mutilado mientras corría hacia la carretera, todos asesinados de la misma forma haciendo del campo una llanura de sangre, pero lo que mas lo aterró fue lo que vio cuando llegó a la carretera. Sus piernas flaquearon, su boca seca busco agua, pero nada los distrajo de ver la cosa que se alzaba sobre la ciudad a lo lejos, edificios en ruinas y columnas de humo eran cubiertas por una gigantesca estructura similar a una nube con luces verdes y rojas, charcos de sangre se extendían sobre toda la carretera y cadáveres humanos en la misma condición del ganado adornaron toda la escena y inundaron la mente de un paralizado David, el entonces comprendió todo lo que pasó, que tarde. Unas manos de tres dedos totalmente cubiertas de sangre lo tomaron por sus hombros y lo jalaron.

De mi mente

lordmega

Please wait...

¿Quieres dejar un comentario?

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.