La Historia Comienza Donde Termina.

Me encontraba solo sentado en mi sofá, hundido en lo que serian mis pensamientos, me pudría del aburrimiento, pero de repente escucho que alguien golpea a la puerta, suponiendo que era como una salvacion de ese silencio intolerable, fui a recibir a mi visitante, era un hombre de  avanzada edad, el cual solo me observo por nos segundos, volviendo en si, me preguntaba si no había visto a una niña pequeña rondar por estos rumbos, yo sorprendido por la pregunta, respondí que no, el pareció ver mi cara de sorpresa, y solo emitió una pequeña risa, sonrió y se despidió, y yo hice lo mismo, pero aun con la duda de esa desafortunada niña, y acto seguido volví a esa monótona secuencia de aburrimiento que me absorbía por horas, hasta que mi mente me hizo percatar que la noche había llegado a su punto mas alto, entonces decidí buscar algo de comida, debido a que había perdido la noción del tiempo y el espacio, apenas toqué el refrigerador y… tocaron a la puerta.

 

Solo pensé: «que suerte la mía, ya parece convertirse en una desdicha». Fui a abrir de mala gana, pero solo mostré mi mejor cara al visitante, la cual era un niña pequeña que, suponiendo por su desesperación, estaba perdida y un tanto asustada. Le pregunté que donde estaban sus papás y ella solo respondió: «No lo se, estaba jugando en un parque, y cuando volví a casa ellos ya no estaban».

Estremecido por la respuesta de aquella niña angelical, decidí ayudarla a encontrar el paradero de sus padres, empezamos a caminar y le pregunté cual parque era en el que estaba, tal vez sus padres la fueron a buscar ahí cuando ella se fue, me respondió: «esta pasando aquel bosque», solo me quede mudo un momento y le dije: «avancemos pues». Empezamos a caminar, a medida que caminábamos, todo se tornaba oscuro, no había iluminación, nada que nos guiara por ese sombrío bosque, y de repente… ella… se había perdido, me puse nervioso y la empece a buscar por varios lados, pero simplemente no la encontraba, de repente, veo algo no tan alejado de mi, parecía ser un silueta de un hombre, grité: «¿Quién anda ahí?» la silueta solo avanzaba, esta vez solo me quedé paralizado, seguía avanzando y avanzando hasta que se divisaban todos sus rasgos físicos, entonces entendí que era aquel anciano que había preguntado por la niña, solo dijo: «¿Estaba contigo?», «no se a quien se refiere», le respondí…»la niña». Solo afirmé con la cabeza.

 

El solo se rió y me dijo»esa niña me la he llevado yo, ya no puedes hacer nada por ella, llevaba tiempo en buscarla, siempre se refugiaba con alguien, y no podía capturarla, pero gracias a tu falta de atención, lo he conseguido ahora es mía, y tu también lo eres…» Y solo sentí como el me podía golpear, y… sentí como la sangre escurría por mi cuerpo, yo solo veía como me atravesaba con un cuchillo, perdí esperanza de que solo me dejara herido, ya no sentía nada, pero desperté y…estaba sentado en mi sofá, escuchando como golpeaban la puerta…

Creación Propia

Fernando Silva Elizalde

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